San Valentín se acerca y ya sabemos que el rojo es el color fetiche del Día de los Enamorados, y aunque no lo sea, pues qué le vamos a hacer, se convierte por obra y arte del consumo. Y con sumo gusto les cuento todo lo que acaba de lanzar la firma de lencería francesa Etam para que estén al tanto y no se les vaya de la manos la oportunidad de quedar bien.
Pues según narra la nota de prensa, esta temporada Etam (su nombre proviene del material etamine, tejido con el que sus fundadores creaban las primeras piezas con las que se comercializaba) trae consigo el privilegio de la comodidad, el movimiento corporal sin restricciones y la agilidad: la libertad de moverse y pensar. Inquietante eso de pensar cuando tienes libertad de movimiento. Nunca se me habría ocurrido. Lo llevo diciendo: hay que hacer una tesis doctoral de las notas de prensa.
Pero yendo al grano, las prendas están realizadas con ondas de encaje elástico reciclado, que te deja la conciencia muy tranquila, y telas modernas. Los colores mucho más vibrantes que en otras ediciones, dónde va a parar, y los estampados, con detalles muy especiales.
La colección, continúa la nota de prensa, es ecléctica; es decir, que se adapta a todo tipo de mujeres. No saben el peso que me han quitado de encima, porque servidora entra en ese segmento de mercado, que es un término que prefiero al otro. Sí, a ése que lo dices y tocas madera.