El 19 de agosto de 1883 nacía en Saumur, en la región francesa de la Auvernia, una mujer que creó un estilo sin fecha de caducidad, Coco Chanel. Hoy, para celebrar el día de su cumpleaños, llega «Gabrielle: Una historia de pasión», una película que se puede ver en el sitio web Inside Chanel inside.chanel.com. Un regalo para todos aquellos que quieran descubrir los entresijos de esta inefable mujer.
Rebelde pero también revolucionaria, ya que le dio la vuelta al calcetín de las modas y modos en un momento en que la mujer empezaba a despegar como ser autónomo. Además de libre, elegante y apasionada. Cuatro características que definen a la perfección la personalidad de una mujer que sigue cautivando a pesar del tiempo transcurrido. Pero también firme en sus posturas: «Nunca he hecho las cosas a medias», solía decir.
Este año la Casa Chanel la ha homenajeado con un perfume y un bolso que llevan su nombre de pila: Gabrielle. Ahora la película «Gabrielle: Una historia de pasión» viene a sumarse a esa lista de merecidos elogios a una mujer que sigue siendo fuente de inspiración para sus congéneres. Coco Chanel era lo que hoy en día denominamos una emprendedora nata, pero fue su actitud ante la vida la que le sirvió de guía.
Si se leen toda esa cantidad de libros, de reportajes, se ven sus documentales y las cintas que le han dedicado se llega a la conclusión de que Coco Chanel se enfrentaba a todos los obstáculos. No había muralla que no rebasara sola o en compañía de otros. Sobre todo hombres. Nunca tuvo empacho en reconocer que muchos la ayudaron a escalar puestos en la sociedad y a hacerse un nombre en la moda.
El sitio web Inside Chanel ya nos ha puesto en antecedentes de la singularidad de esta mujer de la que nunca se sabrá a ciencia cierta su origen. Recuerda en su fabulación a la bailarina Lola Montes, de la que Cristina Morató nos da buena cuenta en su libro «Divina Lola». Chanel también cambiaba a conveniencia sus raíces según soplara el viento de la fama. Tal vez es condición de las mujeres que aspiran a ser únicas.
Y nos ha puesto en antecedentes porque antes de que se emita a partir de hoy «Gabrielle: Una historia de pasión», ya se han podido ver dos anteriores, donde se recrea la particular idiosincrasia rebelde y nada conformista de Coco y otra en la que se narra su búsqueda de la libertad. La pasión para Chanel era su motor, ese empuje necesario para edificar un imperio que ha resistido al peor enemigo, el tiempo.