LOKITAS, BOLSOS DE TELA HECHOS EN ESPAÑA

por Clara Guzmán
Foto: © Tamara Arnáez de la Cruz @historiasqueempiezanconunsi

Telademoda continúa descubriendo firmas artesanales españolas, donde, en su mayoría, son las mujeres las que han dado un paso al frente, se han liado la manta a la cabeza y han toreado a las adversidades con un resultado bastante óptimo. Seguimos por tierras de Jerez, donde abundan las emprendedoras. En Instagram vende la firma @lokitashandmade, ¿la conoces? Ofrece fundas de portátiles, neceseres, bolsos y bolsas de viaje muy estilosas, en distintos tejidos. Todo «made in Spain». La artífice es Myriam Vázquez, quien ha formado un compacto equipo con dos de sus tres hijas. Vamos a conocer su historia.

Foto: © Tamara Arnáez de la Cruz @historiasqueempiezanconunsi
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Al principio del proyecto, Myriam tuvo un pálpito, una de esas intuiciones que de vez en cuando le asaltan y le dejan un buen sabor de boca. «Iba en el coche y en la radio sonó una canción que en uno de sus estribillos hablaba de unas lokitas». Así fue cómo surgió el nombre de esta aventura que comparte con sus dos hijas Lucía y Myriam Segovia. La tercera, Carmen, es profesora y trabaja en San Fernando. «Me quedé viuda en 2013 y hasta entonces había sido ama de casa, pero tan creativa como mi hija Lucía, que es la que me ayuda a diseñar. Ella estudió ingeniería en Puerto Real y un día le hice una funda para el portátil. Se la llevó a la Universidad y ahí empezó todo».

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«Hice una, dos, tres y a la cuarta funda pensé que no podía seguir haciéndolas por amor al arte. Por entonces las confeccionaba a mano hasta que al cabo de los meses me compré una máquina de coser. De las fundas pasamos a los neceseres, a los bolsos y a las bolsas de viaje. Ahí es donde dimos el salto empresarial. Mi hija Lucía, que tiene además su trabajo, me ayuda también en la parte tecnológica. Gracias a su labor en las redes sociales, el negocio se ha incrementado y tenemos muchísima visibilidad. Myriam, por su parte, se ocupa de los pedidos».

Foto: © Tamara Arnáez de la Cruz @historiasqueempiezanconunsi
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Myriam me cuenta que tanto las telas como los apliques los compra en España y que ahora Lokitas va a dar un salto cualitativo con un proyecto de remates en piel de Ubrique. «Nunca he querido tener prisa. Hemos funcionado a demanda del cliente. Vamos introduciendo novedades sobre la marcha. No hay que forzar la máquina. Estamos creciendo a buen ritmo, despacito y buena letra». Dice que fueron pioneras en incluir las iniciales en los bolsos y que luego se ha masificado. «El primer bolso que lanzamos, el número 1, lleva una base de polipiel negra y la parte superior es de lino. Es muy versátil, combina con todo y la gente nos lo sigue pidiendo».

Foto: © Tamara Arnáez de la Cruz @historiasqueempiezanconunsi

«Es verdad que no hay nada inventado. Te das una vuelta por Instagram y coges ideas. Ideas que luego adaptas a tu estilo. Para mí un bolso es un complemento importante, que identifica a la persona y además me da seguridad. Los nuestros suelen ser de colores suaves, nunca tonos demasiado estridentes. Nos gustan mucho los empolvados. En el apartado para hombres, que también tenemos, las bolsas de viaje suelen ser verde cacería, marrón y azul marino. Trabajamos los terciopelos, el negro es la estrella en todas las colecciones de bolsos. Mientras que en bolsas de viaje nos inclinamos por los tejidos de tapicería que son mas recios».

Foto: © Tamara Arnáez de la Cruz @historiasqueempiezanconunsi

La clientela de Lokitas está en Valencia, Murcia, Madrid, Barcelona, Pamplona y en Badajoz. En Andalucía le compran, sobretodo, en Sevilla, Córdoba, Cádiz y Málaga. Las fundas de portátiles, los neceseres y las bolsas de viaje son las más demandadas. «Nuestra compradora está en el tramo que va desde los 18 a los 30 años, aunque últimamente hemos notado que se han sumado muchas señoras. Hacemos bastantes colaboraciones con «influencers» y eso nos ha dado muchísima visibilidad y venta. En cualquier época del año, menos en Navidad que el trabajo se desborda, podemos personalizar el bolso e incluso escribir algunas frases en el interior del neceser».

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