El tiempo entre costuras dispara la venta de máquinas de coser

 

 

Somos lo que sale en la tele. La televisión marca pautas de conducta, marca modas y modismos. No invento nada en absoluto, pero es que cada vez me sorprende más el poder de esa pantalla que la mayoría de la gente suele tener en el rincón más preciado de su casa. Reconozco que soy una rara avis por no disponer de este presuntuoso oráculo, pero no por ese motivo soy ajena a sus tentáculos, que te atrapan y no te sueltan, como si fueran una morena; al menos las morenas que había en las playas de mi tierra, Ceuta. Ahora leo en El Mundo que la serie El tiempo entre costuras ha disparado las ventas de máquinas de coser.

 

La serie, que veo vía internet, y que tiene su éxito merecido (se ajusta a la novela de María Dueñas, la ambientación es correcta (demasiado impolutas las chilabas, por cierto)  y el vestuario impecable, ha devuelto a las españolas la afición por la costura. Todas quieren ser Sira Quiroga, aunque sea una Sira de andar por casa. Según la página web de ventas Amazon.es, durante los cuatro primeros capítulos de la serie, cuyo escenario era el taller de alta costura que regenta Sira, la modista española refugiada en Tetuán, las ventas de máquinas de coser aumentaron un 135%.

 

Este hecho tiene, a mi juicio, varias lecturas. Sociológicamente, la desaparición de las Singer o las Alfa (eran las marcas más populares) de los hogares de los españoles fue un síntoma de que el país iba tan bien que las mujeres ya no tenían que pedalear y girar la rueda con la mano para coser para su prole o para la calle. ¿Quién no recuerda la escena de una madre, una tía, una abuela o una hermana en plena acción? ¿Y el soniquete de la máquina? Formaba parte de los sonidos familiares como ahora el de la llegada de un mensaje en el móvil de última generación.

 

¿Se han vuelto más hacendosas las españolas debido a la crisis económica o a la emisión de El tiempo entre costuras en Antena 3? Al parecer y según la información aludida, el mayor pico de compras se contabilizan los lunes por la noche durante la emisión del capítulo, y es justamente en este horario cuando los pedidos de máquinas de coser registran una mayor intensidad: entre las 22:00  y las 00.00 horas. Las ventas de este artículo han aumentado un 124% de media respecto de los pedidos registrados durante esta misma franja horaria antes de que se empezara a emitir la serie . O sea, somos lo que sale en la tele.