He visitado el recién inaugurado Museo del Diseño de Barcelona (www.museudeldisseny.cat/es) que por cierto su entrada es gratis hasta el 31 de este mes, y me ha gustado. Es uno de esos museos con los que te identificas, porque alberga tu vida a través de los distintos objetos que han formado o forman parte de ella. Allí están las primeras ollás exprés, compartiendo espacio con el frasco de la colonia Agua Brava, el mobiliario de tu casa de antes y el de ahora o las sillas Toledo, esas que vemos en las terrazas de los bares. Así hasta 70.000 objetos con nostalgia del ayer y expectativa de futuro.
El Museo del Diseño de Barcelona (Museu del Disseny de Barcelona) está ubicado en el barrio de Las Glorias, al final de la Gran Vía, sitio archiconocido por acoger «Los encantes», un mercado al estilo de El Rastro de Madrid o el Jueves de la calle Feria, en Sevilla. El museo tiene su sede en el edificio Disseny Hub Barcelona, bautizado popularmente como la grapadora por su semejanza con este utensilio de oficina. Es obra del equipo de arquitectos MBM (Martorell, Bohigas, Mackay, Capdevila y Gual), que lo diseñó expresamente para conservar, exponer y difundir sus colecciones.
El edificio está compuesto por dos partes diferenciadas: una subterránea (que aprovecha el desnivel creado por la urbanización de la plaza) y otra que emerge a 14,5 metros de altura. Concebido como museo de las artes del objeto y del diseño, integra las colecciones del Museo de las Artes Decorativas, del Museo de Cerámica, del Museo Textil y de Indumentaria y del Gabinete de las Artes Gráficas de la ciudad condal. Abarca desde el siglo IV a.C. hasta la actualidad, con colecciones únicas y de alcance internacional, como los tejidos medievales, el vidrio catalán esmaltado del siglo XVI o la cerámica de L’Alcora, con piezas realmente maravillosas.
Estas artes del objeto enlazan con las colecciones de diseño de autor del siglo XX: de producto, gráfico y de moda. Cada apartado se ha dividido en distintas plantas, con el fin de hacer la visita más amena y didáctica. Para los amantes de los detalles, hay panales informativos sobre la evolución de los distintos objetos que se muestran. En el caso de la moda, de las diversas tendencias, de sus repercusiones en la sociedad e incluso en la salud de la mujer, como es el caso del corsé.
Simultáneamente, se proyectan vídeos que recogen entrevistas con los distintos autores de los objetos que se muestran. Entrevistas que, al igual que toda la información de paneles y folletos, se editan en castellano, catalán e inglés. Todos los apartados tienen su interés, pero personalmente me quedo con el de diseño gráfico, donde se recopilan anuncios tan curiosos como el de las tortas de Inés Rosales de Castilleja de la Cuesta (Sevilla) de los años cincuenta o los de distintas medicinas a lo largo de los años.
El de moda hay que verlo. Está tan documentado que se incluyen incluso citas de escritores «serios», como Josep Pla, haciendo una encendida defensa de la moda en su obra «Un señor de Barcelona». Cuenta con la originalidad de incluir entre los trajes de época el diseño de una firma contemporánea, que guarda cierta similitud con sus antepasados. Como nadie es perfecto, en esta sección se genera cierta confusión entre los carteles y la autoría de las creaciones a las que se refieren. Pero ten en cuenta este museo en tu próxima visita a Barcelona. No te decepcionará.
2 comentarios
Me encanta! tiene que ser super interesante, gracias por compartirlo 🙂 mil besos
Gracias por el consejo. Voy en febrero a Barcelona y me lo apunto para visitarlo. Dan ganas de ir ya.
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