DESIGUAL Y LACROIX, UNA PAREJA FLORIDA

por Clara Guzmán

Qué pareja tan pareja la de Lacroix y Desigual o Desigual y Lacroix. El creador francés, que quería ser Dior de pequeño, plasma todo su bagaje en las colecciones que realiza para la firma catalana desde hace diez años. Que para algunos Christian Lacroix ha perdido muchos puntos con este vínculo; que para otros Desigual no les convence porque es «demasiado comercial», qué le vamos a hacer, pero, señores, al César lo que es del César. Lacroix, licenciado en Lenguas Clásicas (sabe latín y griego) e Historia del Arte, es un creador rotundo, con oficio. No todo el mundo está capacitado para realizar sus diseños y poblarlos de originales estampados. En esta ocasión, la inspiración es el poder de las flores y su colección de otoño-invierno está basada en el concepto de renovación. ¡Ah! para los tiquismiquis, ese colectivo que ha reverdecido con las redes sociales, a Lacroix le gustan los toros. No, si…

“En cada colección, siempre hay un tipo de flor que domina y prevalece sobre las demás. Para este invierno, la flor clave es el pensamiento. Y me encanta la palabra en español – «pensamiento» – porque se relaciona con los sentimientos reflexivos, aficiones y sueños. Es muy poético y es el fiel reflejo de lo que trata esta colección”, dice Lacroix. Los diseños presentan estampados y técnicas que desafían los límites de la moda convencional con camisas de flores de pensamiento descomunales, sudaderas con collages, parkas de camuflaje botánico, vestidos con acuarelas florales, jerséis con ilustraciones dibujadas a mano y conjuntos de dos piezas con estampados surrealistas inspirados en las pinturas de Dalí.

Esta sensación de liberación es lo que el diseñador busca: “Me gusta cuando las creaciones artísticas parecen venir «frescas», como si salieran directamente de la paleta o del lienzo a las telas y tejidos, y que se sientan como un sutil primer boceto o como una pintura al óleo más vívida. Con este tipo de estampados no necesitamos formas y patrones complicados; al contrario, cuanto más obvio sea el diseño, más simple será la prenda. Es un contraste que siempre me gusta explorar en mis colecciones”. La innovación siempre está a la vanguardia para Desigual. En esta colaboración las imágenes de la campaña fueron creadas con inteligencia artificial, donde los lirios y orquídeas se mezclan para crear flores nunca vistas, representando un universo alternativo de florecimiento digital.

La activa colaboración entre Desigual y Christian Lacroix expresa una pasión por los diseños atrevidos que reinventan la moda a través de una visión novedosa. El compromiso de Desigual, que nació en Barcelona en 1984, de crear piezas únicas y vibrantes se alinea perfectamente con la relevante estética de alta costura de Lacroix. La colección continúa la misión de sostenibilidad de la marca. Con la intención de mirar siempre hacia el futuro, todas las prendas están confeccionadas con materiales sostenibles e innovadores que respetan el medio ambiente. Estos incluyen algodón BCI de origen sostenible, viscosa LENZING™ ECOVERO™ de procedencia responsable y poliéster reciclado que reutiliza los desechos plásticos, reduciendo la dependencia de materiales vírgenes y los desechos en vertederos.

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