Loewe ha vuelto por sus fueros. El aperitivo fue el lanzamiento de su línea de bolsos Flamenco, realizada en napa, la piel más suave y delicada de la firma. Ahora nos devuelve la fe en lo auténtico con una campaña sobria y elegante sobre la estrella de la Casa.
Es verdad y el público y la crítica han sido conscientes de ello, que Loewe ha ido dando palos de ciego desde que un aciago día de 1996, precisamente el año en que celebraba su CL aniversario, fuera vendida al grupo LVMH. La legión de diseñadores que desfilaron por la firma a sabiendas siempre de que no harían huesos viejos en la Casa, puso la nota de desconcierto en una clientela que ha sido fiel a una firma símbolo de distinción. La esencia de años de trabajo artesanal minucioso, escogido y hecho con el mimo de quien sabe que crea piezas únicas, se estaba borrando del logotipo. Un logotipo anhelado por muchas generaciones como reflejo de posición social.
El principio del fin
El libro editado por Loewe con motivo de su redondo aniversario era el principio de un fin, una especie de legado de lo que fue y desgraciadamente no se pudo mantener, lo más difícil, como aseguran los que se implican en empresas de riesgo tangible, pero sobre todo intangible. «Un libro – escribía Enrique Loewe Lynch, descendiente de aquel artesano alemán que puso la primera piedra de un negocio de lujo en el Madrid de 1846-, que es también un objeto que, como todos los que Loewe produce, sea distinción, artesanía bien hecha y modernidad». Escritores como Néstor Luján, Soledad Puértolas o Luis Racionero avalaron entonces el prestigio de la firma en los distintos capítulos de la obra.
Iconos 2011
Ahora es la calle, la única y exclusiva juez, la encargada de dar el visto bueno a estos diseños, presentados en una campaña, que, bajo el nombre de Leather Icons 2011, viste la piel que habita en Loewe a mujeres de distintas edades y ámbitos. Ahí está, espléndida en su natural madurez, Ángela Molina, con un vestido de napa negro; Bip Ling, con un chaleco acolchado y Dree Hemingway, con una cazadora de esas que a la legua se sabe que su autor tiene oficio. Todas han posado para el objetivo de Daniel Jackson, con el estilismo de Katie Grand. Y todas llevan implícitas la responsabilidad de ponerse en la piel del genuino Loewe.
11 comentarios
I like reading blogs written by people who really know what they are writing about
Buenas noches, me encanta cuando veo tanto tráfico en este blog, que es un medio de comunicaciónmuy interesante. Me leo todo, me gusta todo, desde las joyas del Taller de Diseño, a las zapatillas rojas, Coco Chanel y la otra señora que se llevaban a muerte. Pero hoy voy a escribir de Loewe. He leido a Rosa y mi historia es muy parecida. Mis hijos me regalaron entre todos un bolso Amazona de Loewe. Yo iba muy orgullosa con mi bolso cuando en una calle me dieron un tirón, me tiraron al suelo, me rompi las gafas. Un numero. Llore por el daño sentimental. El susto fue lo de menos, pero como siempre hay gente buena, los ladrones lo tiraron en un callejón perdido, una señora lo vio, encontró unos papeles y fue averiguando hasta que dio conmigo. El bolso lo arreglé, lo mande a limpiar y lo llevo mas orgullosa que nunca. Es una historia para mi preciosa. Buenas noches a todos los que leen este blog
Buenas tardes. Me llamo Rosa y voy a contarles mi particular historia con Loewe. El primer bolso que tuve de esta firma me lo compraron mis padres cuando aprobé el COU y la Selectividad. Fue un regalo maravilloso. El segundo me lo regaló mi marido cuando me quedé embarazada de mi primer hijo. El día 26 de junio fue mi cumpleaños y ese hijo me regaló el último bolso de Loewe que tengo, el más bonito porque sé que ha sido un gran sacrificio para mi hijo comprarme con su sueldo de recién licenciado este bolso. Los conservo todos y todos me los sigo poniendo, por eso me alegro que esta firma vuelva a sus orígenes. Me he alegrado al leer este blog que me ha recomendado mi hija. Yo creía que era de cosas más frívolas, pero me he llevado un rato leyendo y todo me gusta. Felicito a esta señora que seguro será como su blog, muy distinguida.
Por experiencia, hasta que no rozas la piel de Loewe en tu piel, no puedes adivinar qué sensación de segunda piel te hace sentir. Desde luego que es la mejor piel del mundo, por su procedencia, por su saber hacer y por el mimo que ponen en cada puntada. Gracias, Clara, por acercarnos a la piel que habitamos. Un lujo, y como tal, una inversión.
Me alegro que Loewe dé un salto en su trayectoria y me alegro que en esta campaña se acuerden de actrices como Ángela Molina, con personalidad y garra. Guapísima en ese vestido de napa negro. Muy sensual, sí.
Me gusta loewe y su nueva campaña, parecen que apuestan fuerte!!!
El viejo león ruge de nuevo y parece que con fuerza. La muestra de la nueva colección de piel no puede tener más encanto y «glamour», especialmente el vestido negro. Claro que, la «percha» de Ángela ayuda y mucho.
Fantástico blog y muy variado, de un libro pasa a unas botas, de unas botas a Loewe, hay unas fotos maravillosas con unos textos deliciosos. He conocido este blog este verano y me he enganchado. Ojalá que todas las adicciones sean como estas. Pregunto a mis amigos y nadie conoce a esta bloguera y yo me pregunto si existe como tal.
Interesante la mirada hacia atrás, para seguir hacia delante. El artículo estupendo y los diseños geniales con preferencia sobre el vestido que es fantástico. Distintas pieles, ambitos y edades pero similar poder adquisitivo, porque artesania, calidad y diseño requieren siempre un precio. un beso
Me encanta esta iniciativa de la histórica firma, sobre todo por la fotogenia de mi admirada Angela Molina. Un artículo que une lo antiguo con lo más actual, una mezcla de historia y modernidad. Genial, Clara
Me encanta Loewe y Angela Molina está estupenda con ese clásico vestido de napa.
Los comentarios están cerrados