«Es una colección muy alegre, llena de color, lo que nos permite combinarla con aquellas prendas de colores neutros que son básicos en nuestro armario. También hay una apuesta importante por la sastrería, un concepto que el confort no ha logrado desbancar, sino que lo ha hecho volver renovado y pisando fuerte. Por otro lado, la colección de accesorios viene a completar los «looks» desde la cabeza a los pies enriqueciendo nuestras propuestas». Así define Cristina Mariño «Belleza serena», la nueva apuesta de Roberto Verino (www.robertoverino.com) para esta primavera-verano, presentada hoy en los jardines del hotel Rosewood Villa Magna, dentro de la Semana de la Moda de Madrid. La hija del diseñador gallego está con su padre al frente de la compañía, junto a la directora ejecutiva, Dora Casal.
Se cumplen cuarenta años desde que Roberto Verino iniciara su andadura en el mundo de la moda y es momento de hacer balance. «Para nosotros estas cuatro décadas son parte de nuestra vida. Están llenas de ilusión y trabajo dedicadas a crear prendas con las que llegar al corazón del consumidor. Son un maravilloso punto de partida sobre el que seguir sumando. Si miramos atrás, hemos logrado crear una industria en una población rural, ayudando a evitar la migración, principalmente de las mujeres, de nuestro pueblo. Hemos compartido, a través de nuestras prendas, alguno de los momentos más importantes de nuestros clientes porque nos han elegido para vestirse en sus ocasiones más especiales y en su día a día. Nos hemos abierto al mundo a través de nuestras tiendas tanto físicas como «online»…»
Le pregunto si, en estos años, la moda en vez de democratizarse se ha vulgarizado y me contesta que «es cierto que la necesidad de una propuesta de moda que cambia constantemente ha hecho de la moda algo superficial. Por suerte el rumbo está cambiando y se acerca al discurso que hemos tenido siempre en Roberto Verino, prendas de calidad y con estilo que duran en tu armario y con las que te vinculas emocionalmente. La calidad es una realidad con la que trabajamos diariamente. Es uno de nuestros focos principales ya que forma parte de nuestro ADN. Es un mantra que nos repetimos constantemente “la búsqueda de la excelencia”. Nunca nos daremos por satisfechos porque siempre hay algo que mejorar».
_¿Cómo se enseña a un consumidor a cambiar su filosofía de compra, adquirida durante tantos años?
_El consumidor es inteligente y por ello es consciente de que es mucho más importante tener unas prendas pocas y buenas que te permiten crear un fantástico fondo de armario que tener muchas que por su calidad y diseño no tienen vida más allá de unas pocas semanas. Al menos así es en nuestro caso, en el que nuestros clientes presumen de que nuestras prendas se hacen eternas en sus armarios, pasando incluso de generación en generación porque son diseños que no pasan de moda.
_¿La preocupación por la sostenibilidad será una moda pasajera o se afianzará?
En esta vida todo es cíclico, pero hay cosas que llegan para quedarse y el mundo nos ha dado un toque de atención del que no podemos pasar. Por lo tanto la sostenibilidad ha llegado para quedarse y ayudarnos a hacerlo todo “con más sentidiño”. Nosotros siempre hemos apoyado la sostenibilidad desde el trabajo con unas prendas que por su calidad y diseño se hacen eternas en el armario.
Para Cristina Mariño presentar colecciones en el momento en que se pueden adquirir para su uso es mucho mejor que proponerlas cuando no estarán a la venta hasta seis meses más tarde, «porque suele resultar decepcionante». Sobre las redes sociales dice que «son una herramienta de comunicación y han venido para quedarse. Nuestros jóvenes las usan constantemente para comunicarse entre ellos y nosotros también las utilizamos en ese sentido, ya que cada vez son más los clientes que se comunican con nosotros a través de ellas».
_¿Cree que los oficios se mantendrán en una sociedad en la que impera la prisa y el aquí y ahora?
_Nosotros siempre hemos apoyado los oficios de moda y los consideramos indiscutibles en cualquier colección que se precie, ellos tienen un “saber hacer” que aporta un valor diferencial indiscutible, como por ejemplo nuestros sombreros que se confeccionan manualmente en el sur de España, precisamente en Sevilla, o una colaboración que estamos llevando a cabo con una empresa que se dedica a teñir los tejidos a través del aprovechamiento del corcho…
_Las clientas de provincias siempre se quejan de que, a pesar de ser fieles, las presentaciones y demás saraos siempre se hacen en Madrid ¿Va a cambiar esta política de empresa?
_Está claro que Madrid está reconocida como Capital de Moda, pero somos conscientes de lo que nos quieres decir y estamos trabajando con la intención de acercarnos cada día más a las provincias; de hecho, este año, con motivo de nuestro XL aniversario, hemos diseñado un plan que nos conduce hacia ellas con eventos locales, exposiciones y otras acciones que, sin duda, nos vincularán más con esas ciudades.