Unos dicen que eres de donde paces y no de donde naces. Otros, que se es de donde se estudia el bachillerato, pero hay quien dice que se es de donde nacen los hijos. Versiones hay muchas, pero servidora es de Ceuta y no abdico de mi ciudad bañada por dos mares, el Mediterráneo, muy a lo Serrat, y el Atlántico, frío como un témpano de hielo, pero con unas playas que merecen la pena estar tiritando un tiempo después del remojón. Pues Levi’s también está por la labor de rendirle tributo a sus orígenes.
«Quien eres viene definido por el lugar del que provienes, tu pasado, tu presente y tus aspiraciones, así que para la primavera 2015 nuestra inspiración es San Francisco- de donde somos- y estaba ahí delante de nosotros, llamándonos desde el bolsillo trasero de nuestros 501® – Levis’s Strauss& Co, San Francisco, California», ha dicho y muy bien dicho, por otra parte, el director creativo de Levi’s®, Jonathan Cheung, cuyos padres son de Hong Kong, pero que vivió su infancia en Inglaterra y actualmente reside en EE UU.
La nostalgia o pérdida de lo que se ha tenido y querido, marca la pauta de esta temporada en la firma por antonomasia de los pantalones vaqueros y de todas esas prendas que surgieron a raíz del éxito de una idea que luego se convirtió en un estilo de vida. Es un homenaje a la ciudad que vio nacer un tipo de vestimenta capaz de revolucionar las modas y los modos y hacerla imprescindible para todo aquel que ame la libertad y sus derivados.
En este ejercicio de nostalgia cabe todo: desde la niebla que viene de Ocean Beach y los graffitis, hasta los mineros, los primeros en enfundarse unos pantalones prácticos y duraderos, pasando por los hippies y las nuevas tecnologías de un presente, en el que todavía tiene hueco el pasado más puntero. En moda, ya lo sabemos, vivimos de la cosecha del pasado. Lo dijo la gran Margarita Rivière, recientemente fallecida: En el siglo XXI vivimos de las rentas del XX.
El equipo de Levi’s® ha metido en una coctelera todos estos ingredientes, con la belleza natural de San Francisco como estandarte y ha lanzado una colección en la que el hilo que nos conduce al ovillo es la amplia gama de acabados denim, reflejando la forma en la que la niebla desaparece lentamente y cambia la luz de la ciudad a lo largo del día. Estos colores están mezclados con sombras y tonos neutros, contrastando con otros complementarios como el granate oscuro, los azules «fresh» y los grises «cool».
Además de los pantalones, esta colección, en su línea masculina, cuenta con una gran variedad de «tops» y chaquetas, como las camisas en «chambray» y camisetas de rayas surferas. Para la mujer incluyen conjuntos femeninos o de inspiración «boyfriend»: el nuevo 501® CT o la amplia variedad de «skinny jeans», en tiro alto, medio y bajo, combinados con distintos «tops» como camisetas y camisas. Para rematar el conjunto, Levi’s® propone una selección de «sneakers» (zapatillas) inspiradas en su renovada herencia y realizadas en denim de la mejor calidad. Es lo que tiene la nostalgia.
4 comentarios
Hola. Qué chulada de artículo. Me gustan también las fotos pero el texto es increíble. Soy periodista y nunca se me hubiera ocurrido empezar así un artículo. Es verdad que hay que aprender de los mayores. Me encantan también las zapatillas vaqueras.
Yo también soy una seguidora de esta marca, me gustan todas sus prendas, pantalones, chaquetas, bolsos, etc, pero me acabo de enamorar de las zapatillas. Me voy a buscarlas.
Me encantan las fotos porque realmente transmiten el espiritu de Levi’s pero aun más me ha gustado el enfoque que le has dado, muy original y distinto a lo que suele leerse en artículos de moda. Chapo!
Me encanta este artículo. Soy una fiel consumidora de Levi’s desde que salieron,pero lo que más me gusta es el texto. No sé si la gente se detendrá a leerlo, pero siempre merece la pena.
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