Marypaz y El Caballo, dos firmas sevillanas, a por todas

 

 

Las noticias se han producido con un día de diferencia entre una y otra, y la fuente es el reputado portal Modaes.es. La primera en saltar a la arena de las redes sociales fue que Marypaz, la empresa de calzado de bajo coste con sede en Sevilla y fundada en 1975 por Ángel Aguaded, pisa fuerte en los mercados internacionales. La compañía ha firmado un acuerdo de franquicia con Al Hokair, socios, entre otros, de Inditex y Mango, para abrir treinta y cinco tiendas en Arabia Saudí, en un período de cinco años.

 

 

El objetivo de la internacionalización de Marypaz, que cuenta con una plantilla de más de 1.500 personas, se está cumpliendo. Empezaron por Europa, con tiendas en Francia; siguieron por Iberoamérica y ahora han desembarcado en Arabia Saudí, donde acaban de inaugurar su primera tienda en Yeda, la segunda ciudad más importante de Arabia Saudí. Marypaz produce un 30% de sus zapatos en España y un 70% en China, y prevé facturar en torno a 190 millones de euros en 2013, un 8% más que en el año anterior, siempre según informa el portal Modaes.es.

La siguiente noticia tiene otro cariz, pero no deja de ser positiva porque se mantiene el nombre de una marca que tuvo sus años de gloria y que nació en Sevilla, en 1892, como guarnicionería  y tienda de aperos y útiles de labranza. Luego, se convirtió en una firma señera de moda, que ha ido dando bandazos empresariales, agravados con la crisis. Ahora, la empresa toledana Kangaroos, especializada en la fabricación y distribución de calzado, va a invertir seis millones de euros para que El Caballo regrese al mercado.

 

 

 

Según informa Modaes.es, la adquisición de El Caballo ha incluido la marca, la unidad productiva de la enseña, así como dos tiendas, situadas en Sevilla y en Valencia. El Caballo entró en concurso de acreedores, antigua suspensión de pagos, en septiembre de 2011. La producción permanecerá en Sevilla, ya que los antiguos trabajadores de la firma preparan la creación de una cooperativa para seguir operando la fábrica, que será cedida por los nuevos propietarios de la empresa. El objetivo, señalan, es «mantener la calidad y la herencia sevillana».