El color es vida y la primavera nos invita a la alegría. No creo que hayamos tenido tantas ganas de disfrutar como ahora, después de que un virus nos recordara que somos mortales, como a César el esclavo de turno cuando entraba victorioso en Roma y le susurraba al oído: recuerda que eres un hombre. Lebor Gabala (www.leborgabala.com) se ha puesto en la piel de todos y ha creado una colección tan vital que aún estamos en invierno y el entusiasmo nos salpica. Con la llegada de estos primeros rayos de sol, al menos en Sevilla, la prisa porque venga la ansiada primavera se acelera viendo la colección «California Dreamin» que Maite Muñoz ha creado para su firma Lebor Gabala.
Cuentan mis amigos de la agencia de comunicación de moda Finally Press, que la colección está inspirada en la canción del mismo nombre que escribieron John y Michelle Phillips cuando aún no habían formado el grupo de folk rock «The Mamas & the Papas», que fue puntero en los sesenta. La canción nació en la fría Nueva York invernal, al igual que los diseños de Lebor Gabala, cuando la nostalgia por el buen tiempo y el ambiente cálido de California se acentúa. Con la colección recorren en coche la costa Oeste de Estados Unidos y se inspiran en las siluetas de los años setenta, los estampados florales y psicodélicos que marcaron una época muy significativa para la moda.
Todos acompañados de color, mucho color, que es sinónimo de alegría, de luz, de bienestar, de todas esas cualidades que tiene el buen tiempo, que son además contagiosas. Nos afecta al espíritu, que lo pone en marcha; al entusiasmo, que saca la batuta y ordena y manda diversión, plenitud y ausencia de grisura. Pues a vestirnos de vida. A ver qué tenemos por aquí: Vestidos de flores enormes y motivos psicodélicos, de esos que entonces se decía que representaban al futuro. Un futuro de círculos «sui generis» y refulgentes de color. Todos tienen movimiento, porque a la vida hay que ponerle ritmo y más después del forzado parón sanitario.
Hay también vestidos, faldas y camisas en viscosa, seda y voile de algodón, un toque «vintage» y un guiño al movimiento hippie, ese que nos trae la comodidad en prendas holgadas y estilosas, además de acercarnos, aunque sólo sea con la mente, a los eternos veranos en Ibiza. En la colección también se ha recuperado el mismo punto calado de «tops», vestidos y faldas ajustadas que Lebor Gabala (@leborgabala) realizara en sus comienzos. La playa y el sol, más presentes que nunca en la serie «terrycloth». Confortable y divertida en conjuntos de bermuda y sudadera en colores vitaminados. Hay también jerséis estampados digitalmente que recuerdan las flores de los vestidos y como novedad Lebor Gabala ha incorporado algodón orgánico en la serie de punto, manteniendo así su identidad y tradición.
Para los que acaben de aterrizar en telademoda y desconozcan la historia de Lebor Gabala, asidua por estos lares, vamos a ponerlos en antecedentes con unas pinceladas. Lebor Gabala es la adaptación fonética de Leabhar Ghabhála Erenn, título de un libro de mitología celta que significa “el libro de las conquistas”. Pero también designa a una firma de moda femenina «made in Spain» que está conquistando tanto al público nacional como al internacional. Las cuidadas creaciones se deben a Maite Muñoz, su diseñadora, quien tras años de experiencia en la industria textil decidió plasmar todo su bagaje sobre su propio proyecto: una marca que se fundamentara en el punto. En el punto y también en la alegría de vivir. La colección de esta primavera-verano es una invitación en toda regla. Vamos a aceptarla.