Foto: The Fashion Law
De Karl Lagerfeld sabíamos que era un bocazas, alguien que se salta a la torera las mínimas normas de protocolo y de prudencia. Algunos apuntarán que son las prerrogativas de la edad, esa edad provecta que te desinhibe de todo, aunque la mayoría acierta al afirmar que, sin rodeos, es un maleducado, por muy grande que sea en el mundo de la moda. Ahora los tiros van por otro sitio. La marca deportiva «New Balance» le acusa de plagiar el logotipo de una de sus zapatillas y del diseño en general de la nueva colección de zapatillas salidas del magín del creador de cabecera de Carolina de Mónaco, la princesa que precisamente las lució en el pasado baile de la Rosa.
Foto: The Fabulist Fashion
Sí, ese baile en el que todos los invitados deben ser estrictos con la etiqueta. La K de Karl o de Kaiser, como se le conoce en el sector, es muy parecida a la N de las «New Balance» de toda la vida. Las de Lagerfeld cuestan 370 dólares y las de la marca deportiva 112. La firma presentó la debida demanda y ahora el asunto está en los tribunales. Otro contencioso más para el hombre de las eternas gafas negras, los mitones y el dueño de la gata Choupette, a la que dice tratar como a una «mujer mantenida». Qué le vamos a hacer.