Juan Galocha y la belleza humanizada

 

Estamos en Sevilla de Moda, la Escuela de moda más importante de Andalucía. Y estamos con Juan Galocha (juangalocha.es) uno de sus docentes, disfrutando de una acogedora luz otoñal. «Si no fuera profesor de esta Escuela no haría lo que hago. El hecho de estar en este entorno arquitectónico me inspira. Mi inspiran la luz, la blancura, las líneas puras y limpias». Juan Galocha es de Mairena del Alcor y el viernes, a las 18: 30 horas, presenta en Fibes, dentro de Sevilla de Boda, su tercera colección: «Mujeres que enamoran».

«Mujeres que enamoran», «aquellas que saben sacar lo mejor de sí mismas para conquistar a quien aman», vuelve a recrear el estilo de los años cincuenta. «La época en que la mujer ha estado más bella  -comenta Juan-; más bella y más femenina, a pesar de la paradoja de ir vestida con una ropa muy sobria, pero con unos tejidos de gran caída. Balenciaga fue su gran valedor y para mí el primero, pero también Dior, Gianfranco Ferré y ahora Armani».

«Es verdad que mi colección de ropa de fiesta, cóctel y ceremonia, está inspirada en las líneas y los volúmenes en los años cincuenta, pero con un toque actual. Son trajes de chaqueta, abrigos, vestidos, faldas de capa…en satenes, dupiones o brocados». Sara Palacios es la encargada de darles vida para telademoda.com, con el estilismo y los tocados de Manuel Eslava.

«Soy una persona que investiga en el mundo de la moda, creando belleza, porque la moda es belleza, pero una belleza humanizada, no «fashion victim». La mayoría de la gente no se para a pensar qué es lo que más le favorece. Se deja llevar por una serie de iconos, que en el caso de Olivia Palermo, me parece correcto, pero que otros, como Lady Gaga no los considero modelos a seguir.

Hasta la fecha, Juan Galocha cuenta con un taller en la calle San Bartolomé, 23, de Mairena del Alcor, pero tiene previsto abrir otro en Sevilla capital. «Vestir bien es ponerte la ropa que más te favorece, que te saque el mejor partido y que vaya en consonancia con tu estado de ánimo. Pero la ropa, sobre todo, nos tiene que ayudar a sacar lo mejor de nosotros mismos, porque la belleza surge del interior».

Juan Galocha está convencido de que el incesante ir y venir de diseñadores de las grandes casas de costura se debe a que la moda se ha vuelto demasiado mercantilista. «El diseñador para crear necesita tiempo y espacio, una pausa. No se puede trabajar con estrés y, claro, con esa presión, la gente se quema». Pero con lo que sí está de acuerdo es con ese «boom» de que los grandes hagan colecciones para, por ejemplo, H&M. «Es positivo, porque acercan la belleza a gente con bajo poder adquisitivo».