Juan Pérez Garramiola (windhorsetime@gmail.com) abomina del negro, de los tonos oscuros, que son sinónimos de tristeza, por eso en cada colección viste a su firma de alegría. Colores vistosos, chispeantes, que levantan el ánimo. Lo volvió a demostrar con sus propuestas de primavera-verano 2012 para Horse Time, en el desfile que organizó en el Hotel TRH Alcora de Sevilla.
Lleva más de diez años sorteando escollos para salir siempre airoso de todas las situaciones en las que su firma Horse Time, de sport elegante (casual en la actualidad) se ve involucrada. Sobre todo de las desaprensivas copias por parte de diseñadores que alardean de innovadores. A Juan Pérez Garramiola le salieron los dientes en el mundo de la moda, un oficio que heredó de su padre, por eso conoce el oficio y defiende con uñas y dientes sus criterios. “Tenemos nuestras propias ideas, que plasmamos en desfiles organizados sin necesidad de que nadie nos asesore o imponga su santa voluntad. El éxito de nuestro último pase en Sevilla se ha traducido en la gran aceptación que la colección ha tenido en toda España, donde vendemos nuestras prendas desde hace más de una década”.
Un derroche de color en sus tres líneas para señora, caballero y niño; cortes nuevos en los vestidos femeninos, sobriedad en los bordados, que han disminuido en las prendas, sobre todo en la camisería, y bikinis. Bikinis, muchos bikinis estilosos y con originales estampados, es el resumen de un pase, en el que el público vibró y se olvidó por un buen rato de la alargada sombra de esa dama tan impertinente llamada crisis.
“Todo está producido en España, menos los bikinis que me he visto abocado a realizarlos en Portugal, empujado por las trabas que me ponían aquí. ¿Que por qué bikinis? Porque en las playas no se ven bañadores, quizás porque las mujeres van arrinconando sus complejos y optan por exhibir su cuerpo. El estampado, donde en algunos aparece, por ejemplo, el clásico retrato de El Che Guevara, es una especie de guiño a la libertad de expresión; es decir, que en nuestras prendas convive la bandera de España con la imagen de un revolucionario”.
Este diseñador empresario de Montilla (Córdoba) asegura que la colección primavera-verano 2012 para señora, caballero y niño, es de las más completas que ha creado. “Los colores, como siempre, vivos y alegres y con gran profusión de rayas y cuadros, en cazadoras, chaquetas, camisas, camisetas, polos… Por primera vez he aplicado algunas serigrafías y vinilos, un material nuevo muy demandado, preferentemente en los bañadores masculinos. Es una colección muy náutica, donde priman los azules marinos, los fucsias, los rojos y los blancos. Además, las prendas llevan bordadas dos escudos en homenaje a la ciudad de Sevilla y a El Rompido, (Huelva) mi lugar de veraneo”.
Entre las novedades que llamaron la atención de los asistentes al desfile hay que reseñar una línea de relojes, en colores llamativos, y unas originales alpargatas, donde se mezclan distintos tejidos y bordados. Es la apuesta optimista para el verano que viene de un diseñador partidario de que se hable menos de crisis y más de creaciones, de proyectos y de ideas.