GABARDINAS DE PELÍCULA

por Clara Guzmán

Ava Gardner, en la película «Forajidos». Foto: ©Getty images

En Sevilla pasamos de la pertinaz sequía a la pertinaz lluvia y, como es sabido, nunca llueve a gusto de todos. Ahora llueve con avaricia, un término muy de moda en la actualidad, tanto como la gabardina o trench. El trench viene de trinchera. Ya saben, «una zanja excavada en la tierra dentro de la cual quedan los soldados protegidos del fuego enemigo o parcialmente a cubierto para poder disparar». Lo dice la RAE que, aunque últimamente anda un poco díscola, sabe de esto un rato. El trench es, por tanto, nuestro aliado perfecto para defendernos de la lluvia que no cesa. Pero también es la prenda estrella en las pasarelas, en la tienda de la sevillana Nuria Cobo y en el cine. Vamos a hacer un repaso por las divas que la lucieron en la gran pantalla, sin olvidarnos que estamos en «el año de la gabardina».

Marlene Dietrich lució esta gabardina oscura en «Berlín Occidente». Foto: ©Getty images

En «La guerra de Babette», Brigitte Bardot se enfundó la gabardina. Foto: ©Getty images

Se llevan ligeras, incluso sin mangas, como amplios chalecos, algunas de seda, pensadas para el verano. Un verano en San Sebastián, por ejemplo. Y no sólo en el clásico color beis. En la pasada semana de la moda de Londres, el primer modelo que se presentó fue precisamente una gabardina, pero negra. El cambio climático ya está por todas partes. Pero, ¿a quién le debemos esta prenda que nos protege de la lluvia y que, puesta con gracia, queda de cine? Nada más y nada menos que a Thomas Burberry, fundador en 1865, con sólo 21 años, de la firma inglesa que lleva su apellido y creador de una prenda de abrigo resistente al agua. El primero en usarla fue el ejército inglés en la guerra de los Boers (1899-1902).

En «Desayuno con diamantes», Audrey Hepburn también usó gabardina. Foto: ©Getty images

Burberry inventó un tejido impermeable, basado en las recias telas que usaban los pastores. Con ella produjo un tejido de algodón en el que primero el hilo y luego la propia tela iban impermeabilizadas. A esta tela, cuya principal cualidad era que dejaba transpirar el cuerpo, además de ser resistente al agua y al viento, la bautizó con el nombre de gabardina. Burberry enceraba las fibras antes de ser tejidas y no después, como hacían sus antecesores. Ahí radicó su éxito. Dicen que medio millón de soldados británicos se las enfundaron en la I Guerra Mundial. Hasta entonces se habían cubierto con pesados abrigos de lana, que incrementaban su peso cuando se empapaban del agua y el barro de las trincheras.

Jane Fonda, en «Del matrimonio al amor». Foto: ©Getty images

Este modelo se llamó «Trench 21» y sigue vigente con la forma más clásica de la gabardina inglesa. Y como le he leído a mi colega Antonio Ortí, al César lo que es del César, gracias a sus amplios bolsillos se convirtió en una prenda indispensable en el campo de batalla. Esta fue la razón por la que se incluyeron anillas en forma de D para asegurar las granadas. También se añadieron las solapas frontales para ofrecer protección adicional, que con los años en el mercado les daría un toque sexy y muy sugerente al atuendo. Esto último y lo que viene a continuación, es ya de mi cosecha. Como por ejemplo, que fue una prenda muy bélica en sus orígenes. Entonces había que salvaguardar a los hombres que iban a las contiendas.

En «Los paraguas de Cheburgo», Catherine Deneuve tenía que llevar gabardina. Foto: ©Getty images

Cuentan que el rey Eduardo de Inglaterra se refería a la prenda como «mi burberry», nombre con el que empezó a conocerse la gabardina en todo el mundo. La tela impermeable de Thomas Burberry también estuvo presente, en forma de tienda de campaña, en la expedición de Roald Amundsen al Polo Norte. Pero las «burberry» también fueron indispensables en el cine para dar una pincelada sofisticada y sensual a las divas de la gran pantalla. También ellos la lucieron. Humphrey Bogart, a la sazón, en aquella acuosa escena en la estación del tren de la memorable «Casablanca». Hoy traigo a telademoda a algunas de las estrellas del celuloide de todos los tiempos que marcaron estilo con esta prenda.

keira knightley se la puso en la película «Sólo una noche». Foto: ©Getty images

En la simbiosis entre el cine y la moda nunca se sabe a ciencia cierta cuál de estas disciplinas de la cultura puso los cimientos para que una prenda adquiriera la categoría de estar a la última. Las divas, no confundir, por favor, con las «influencers» actuales, dieron carta de naturaleza a la gabardina y la convirtieron en un clásico. Y clásico, ya saben lo que dijo el torero Rafael Gómez El Gallo, es lo que no se puede hacer mejor. Desde Marlene Dietrich a Ava Gardner, pasando por Audrey Hepburn, Brigitte Bardot, Jane Fonda o Keira Knightley, pasearon esta prenda por la gran pantalla para demostrarnos una vez más que el cine y la moda es la historia de un flechazo.

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