Desde la Edad Media o quizás desde siempre, los perros han simbolizado en el arte la fidelidad y la lealtad. Fidelidad y lealtad a esos amos que posaban seguros y confiados con su mascota a los pies, entre sus brazos, a su lado… Miro a Manuela Montes, directora de la Agencia de Modelos MMExpression, y pienso en que Mimi (María Auxiliadora) su preciosa dálmata, vino a rescatarla del dolor por la pérdida de su anterior compañera de vida. La miro en esta foto de Beatriz V. Ávila y pienso en que es una afortunada. Ha vuelto a entrar en su vida eso que en el bolero llaman amor del bueno.
(Foto: Beatriz V. Ávila @beavaz. Texto: Clara Guzmán)
4 comentarios
Sí, claro que lo entiendo, aunque yo le tenga un miedo cerval a los perros. Lo entiendo porque miro a sus ojos y todos los ojos hablan, Gracias por tus palabras, compañera.
Dice el Perro con Patas de Percebe, que, aunque el amor del bueno debe ser bidireccional, si hubiera que escoger un sólo carril, él prefiere amar a ser amado.
Yo también.
Ay… a pesar de pesares… qué bonito texto te ha quedado para hablar de un perro. Y me alegra, porque sé que lo entiendes. Y ya sabes cómo me toca.
Zangolotina, estoy con el Perro de Patas de Percebe. No hay nada como amar. Un beso, compañera.
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