¿Cómo se mide una vida? ¿Por el número de años, por su intensidad? La inefable Mafalda lo resuelve con una verdad palmaria: «La mejor edad es estar vivo». El fotógrafo estadounidense Charles Ragsdale, afincado en Sevilla, ha dedicado su tiempo a dejar para la posteridad el libro «Generaciones», retratos de veintiséis españoles mayores de 105 años junto al miembro más joven de su familia. Carmela Truyo Cubero nació en Cazalla de la Sierra en 1910 y murió con 106 años. Su vida, como la de la mayoría de sus coetáneos, estuvo marcada por el duro trabajo, la guerra civil y sus tormentosas secuelas. A los siete años ya era niñera, pero en su madurez se convirtió en la hábil gestora de una tienda que abrió con su marido en el pueblo. Una longeva y fructífera vida, en una imagen que habla.
(Foto: Charles Ragsdale. www.youtube.com/watch Texto: Clara Guzmán)