Hay días en los que una dice, al shakespeare modo, mi reino por un masaje. Y si es un masaje insuperable, como el Marma, una es capaz de coger el AVE desde Sevilla y presentarse en el hotel Grums de Barcelona, en la calle Palaudàries, en el mismo Paralelo. Allí acaba de aterrizar Serena Spa, la marca «premium» de la cadena de spas india Heaven on Earth y, sinceramente, es un lujo para los sentidos.
Yo me he ido a Barcelona, pero el grupo opera en la India, las Maldivas y las Seychelles. Y puedo contar y no acabar, aunque lo mejor de todo es probarlo. Hay quien en vacaciones coge los bártulos, se va a la playa y a los tres días comprueba que lo único que ha hecho ha sido cambiar de cocina y además es más chica. Otros prefieren aventurarse a conocer placeres asequibles y benefactores para el cuerpo y el alma.
En el Spa Serena del hotel Grums estaba Valentina Sardina, una siciliana terapeuta, masajista y supervisora del spa, que me hizo olvidar los males del mundo y los propios con el exclusivo masaje Marma. Un masaje que se centra en los ciento nueve puntos del cuerpo que corresponden a terminaciones nerviosas y que facilitan, doy fe, la relajación absoluta hasta que suena la campana y te devuelve a la realidad.
Una realidad que tarda en llegar si decides brujulear por sus instalaciones, donde te ofrecen desde baños de vapor, sauna o jacuzzi, hasta los chorros de agua más deliciosos, para pasar en remojo el resto de las horas que hayas decidido dedicarte. El hotel Grums ha habilitado un espacio de 200 metros cuadrados para Serena Spa, el único centro de España, por cierto, donde se realiza el masaje Marma.
El «Marma Body, Mind and Spirit Massage» se lleva a cabo con los dedos y la planta de los pies de la masajista, por lo que se exige pericia y dominio de la anatomía humana. Mientras da el masaje, la profesional se apoya en una cuerda que pende del techo para ejercer la presión adecuada sobre el cuerpo de quien lo recibe, que experimenta, lo certifico, una sensación de gran bienestar.
Un masaje que procede del conocimiento ayurvédico y que fue la cadena Heaven on Earth la que lo introdujo en la carta de menús de sus spas en las Maldivas, en 1999 y en la India un año después. Todas las masajistas de Serena Spa han sido formadas en Barcelona por Sabreena Hougaard, experta mundial en este tratamiento, y mi experiencia me confirma que nos ha dejado en buenas manos.
2 comentarios
Pues sí,es la bomba, he tenido la oportunidad de pasar por ese Spa, las manos y los pies de Valentina son maravillosos.Te gustará, Lola.
Hola. Por como lo cuentas eso debe ser la bomba. Me lo apunto para mi viaje a Barcelona en septiembre.
Los comentarios están cerrados