San Valentín está a la vuelta de la esquina y el pobre santo volverá a estar expuesto a las críticas. Sí, a esas que dicen que es una celebración consumista, que el amor no es materialista, que es romántico y todas esas cantinelas. Pero, con el corazón en la mano, ¿a quién no le gusta recibir un presente? Pues entonces…
El rojo ha sido siempre el color de la alegría. Si uno está enamorado está feliz. Tiene el humor puesto las veinticuatro horas del día, la sonrisa fácil y la carcajada floja. Es normal, por tanto, que en San Valentín se ofrezcan regalos donde el rojo impere; donde sea el invitado perfecto.
Porque el rojo simboliza la fuerza, la vitalidad y el calor, aunque también, todo hay que decirlo, la existencia de un peligro cercano. Ese que te alerta de que hay que parar el carro. Cuando se está enamorado, se está fuerte como un roble, aunque haya quien diga que te quedas como el espíritu de la golosina.
Habrá de todo como en botica, pero está comprobado que fisiológicamente, el rojo produce al verlo un incremento de la presión sanguínea, del ritmo de la respiración y de los latidos del corazón, preparándonos para emprender una acción física inmediata. Cada uno la que quiera, claro.
Así que siguiendo con la idea de que el rojo nos pone en marcha, hemos traído a telademoda.com una selección de regalos para este día tan señalado. Los hay de todos los precios, pero si nos ponemos en plan romántico tampoco está mal eso de verlos juntos y soñar que algún día los poseeremos. Es tan bonito el amor…