Foto: ©@chemasoler_fotografo
Vuelve Carmen Corpas a inspirarse en un pintor a la hora de dar vida a su colección de trajes de flamenca, bautizada este año como «Simplemente Carmen». En esta ocasión es el artista holandés Piet Mondrian el que ha paseado su lenguaje abstracto y geométrico de la mano de esta consagrada diseñadora de Carmen Latorre, firma que lleva el nombre de su madre. Ha sido en la edición en que la Semana Internacional de la Moda Flamenca, Simof, cumple treinta años y ha sido recibida con entusiasmo por un público acostumbrado ya a que esta marca, con tienda-taller en la calle Antonio Machado, 39, de Mairena del Alcor, les sorprenda con diseños muy personales, ajenos a las tendencias. Pasen y vean.
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«La moda es arte y es una forma de comunicarse con los demás. El artista con su obra intenta transmitir un mensaje de alegría, de amor a su tierra. En «Simplemente Carmen» he querido rendir un pequeño homenaje a todas las mujeres que llevan este nombre. En mi caso mi abuela, mi madre, mi hija. He querido representar su evolución. De tímida con pocos años, a estar dotada de un fuerte carisma, luchadora, intensa, con personalidad. De adaptarse a las circunstancias adversas de la vida, pero también de disfrutar los buenos momentos con alegría. No quería caer en el prototipo de la Carmen de Bizet, por eso elegí a Mondrian para mezclar lo popular con lo culto».
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Dice Carmen que el arte es también un medio de comunicación, «y a mí el arte me ha marcado mucho en mi trayectoria como diseñadora». Recordemos su colección basada en la obra del pintor simbolista austriaco Gustav Klimt. «La colección de esta temporada es muy juvenil. Mondrian utilizaba los colores primarios, que son la base del traje de flamenca de toda la vida. El negro, el blanco, el amarillo, el verde, el rojo. Es verdad que vi los seis diseños de cóctel que el modista francés Yves Saint Laurent ideó en el año 1965 inspirándose en el pintor holandés. Yo tampoco quería, como él, seguir las tendencias del momento. Yo quería marcar mi tendencia en el traje de flamenca».
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«Todo está hecho artesanalmente, los cuadros que forman el estampado, también. Una pregunta que me han hecho muchas clientas. La geometría, siguiendo el estilo Mondrian, no sólo se observa en los escotes con formas de rombo, cuadrado o triangular, sino que también está en su hechura, que es tipo evasé. Sí, siempre he sido rompedora, pero he vuelto a introducir la tira bordada, que es lo que marca la artesanía y le da clase al traje de flamenca. Hay que evitar que pesen, los míos son muy livianos y las mangas son o bien clavel o jamón. Estas últimas largas y con vuelo en los hombros, dándole importancia a esta parte del cuerpo, que también permite que el mantón luzca con gracia, al evitar que se deslice».
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Carmen Corpas, que no descarta lanzar una línea de zapatos de flamenca, dice que los tejidos de su colección son elásticos como el crespón, las gasas, los brocados y los flocados, lo que permite que el traje sea cómodo. «Lo dije en su momento, durante la pandemia del Covid nos dio tiempo a reflexionar, a valorar la comodidad y a tener vida después del trabajo. Este año, en Simof, hemos pasado de la flamenca de escaparate a la de la Feria, con diseños más comerciales, más ponibles. También ha habido una especie de filtro en la pasarela. Las firmas consolidadas han tenido prioridad y los desfiles han sido más relajados, más tranquilos y serenos».
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«También es cierto que se le ha dado más impulso a los trajes de inspiración flamenca para eventos concretos como las alfombras rojas o invitadas de bodas. Este tipo de traje da pie a ponerle un punto de pasarela, porque admite pinceladas de espectáculo. De todas formas, cuando la mujer se viste de flamenca recibe una especie de inyección de autoestima, porque potencia su forma de ser. Es un traje muy femenino y favorecedor. Un capricho del que hace partícipe a su madre, a su abuela, a sus hermanas y amigas, a todo su entorno y es cierto que desde los preparativos a la terminación del traje es un rito que la mujer vive intensamente».
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Me dice que le haría mucha ilusión que la reina doña Letizia luciera alguno de sus trajes de la colección «Simplemente Carmen». «En concreto el que he realizado con el escote a la caja en blanco con las rayas azul marino de la línea Mondrian». Una línea para la que el creador de Linares (Jaén) Héctor Lara ha diseñado los complementos, mientras que Carmen Vergara ha vuelto a realizar los de la línea de inspiración más flamenca». Carmen Latorre lleva veinte años desfilando en Simof, un foro que considera esencial para que la gente aprenda dónde está el estilo y el buen hacer. «A pesar de sus altibajos, Simof ha logrado crear una cultura de la moda flamenca».