Treinta años no son nada si se saben llevar, por supuesto. Y Cuplé los está llevando con mucha dignidad. Cuplé es una firma de zapatos patria, nacida en Alicante, la tierra donde se ubica el sector del calzado por tradición artesanal. Ahora, con motivo de sus tres décadas, ha querido rendirle homenaje al Mediterráneo que baña toda la zona y que marca carácter. Serrat ya le cantó a un mar que forja espíritus rebeldes, aventureros y creativos; de esos que nunca se cruzan de brazos y esperan a que caiga el maná del cielo. No, de esos que ya estaban antes de que vinieran a descubrir que lo mejor es levantarse después de caer.
Cuplé ha llenado toda su colección de color. El color es la alegría del verano, el que imprime frescura y nuevos alicientes a la vida. A los zapatos se le ha unido una línea de accesorios y otra de ropa, para que todo camine al unísono. Los estampados le dan ese aire estival que todo el mundo busca para relajarse y olvidarse de esa rutina que amodorra. El verano es tiempo de nuevas aventuras, de experiencias para recordar y de sensaciones que duran una eternidad.
Los zapatos, los bolsos y la ropa de Cuplé mezclan lo sofisticado con lo práctico muy acorde con el ritmo de vida de la mujer actual. Las fotos de esta nueva colección primavera-verano 2014 tienen como escenario Tabarca, una pequeña isla de la costa alicantina con mucho encanto. La modelo elegida ha sido la española Bárbara García, premio L’Oreal a la mejor modelo de la pasarela Cibeles. Todo un alarde para rendir tributo a las raíces de una firma española, situada en un enclave mágico, el Mediterráneo.