Siempre he dicho que la foto es la constatación de lo que se escribe. Es la confirmación de que un hecho ha ocurrido, sobre todo antes, cuando el único soporte era la instantánea. En moda ocurre lo mismo. Esta disciplina de la cultura quedaría incompleta sin la existencia de esas imágenes que atestiguan la certeza de que la moda evoluciona o se retrotrae. Larga vida al oficio de fotógrafo.
«Distinción. Un siglo de fotografía de moda», la exposición que se acaba de inaugurar en el Museo de Diseño de Barcelona me ha permitido saber que somos muchos los que pensamos lo mismo. Según he leído en El País (al César lo que es del César) hace cinco años, distintos fotógrafos especializados, junto con Pilar Vélez, actual directora del museo, se propusieron dar forma a una colección de fotografía de moda del siglo pasado, especialmente de su segunda mitad.
Fruto de ese trabajo ha nacido esta muestra de ciento sesenta fotografías de treinta y ocho profesionales de toda España. Además de las que se exhiben, se podrán contemplar, en sistemas telemáticos, las cuatrocientas sesenta y cuatro fotografías que completan los fondos de la colección. La muestra permanecerá abierta hasta el 27 de marzo, en la Sala B del Diseño Hub Barcelona.
La fotografía nos ha ido explicando a través de los años la evolución de la moda, así como los cambios sociológicos de la sociedad. Si uno se asoma a esta exposición se da cuenta de que también en este oficio se confirma el dicho de que todo está inventado. No, no se crean que es nuevo hacer reportajes gráficos (hoy llamados editoriales de moda) en lugares sacados de contexto.
En la muestra vemos, por ejemplo, un reportaje, datado a finales de los años cincuenta, realizado en un cuadrilátero de boxeo, o una magnífica imagen de Oriol Maspons, un grande de la fotografía, donde una modelo vestida de Santa Eulalia, (una firma señera para la burguesía catalana) se pasea por el antiguo mercado del Borne, hoy convertido en zona residencial de la bohemia «chic».
Entre los fotógrafos que exponen su obra están: Ramón Batlles, Josep Compté, Antoni Bernad, Adler & Fresneda, José Manuel Ferrater, Oriol Maspons, Juan Gyenes, Leopoldo Pomés, Manuel Outumuro, Eugenio Recuenco o Carles Roig. La muestra arranca con imágenes de 1902 y 1903, de la mano de Pere Casas Abarca, para llegar a mediados del siglo XX, pasando por las décadas de los 30, los 40 y los 50, donde la moda tuvo tanto que decir y mucho más que enseñar.