Todos los entendidos en materia económica dicen que las joyas son una inversión. Los que somos de letras les atribuimos también propiedades intangibles, como las sentimentales de, por ejemplo, una fecha para el recuerdo. Una ve los diseños de Isabelle Fa que hoy publico en telademoda y se embelesa pensando en la armonía estética de unas piezas fabulosas. Las firmas de alta joyería femenina de Isabelle Fa y Fagnoul, para hombre, han llegado a Madrid de la mano de Wempe, en concreto a la boutique de la calle Serrano, 58, que las tendrá en exclusiva en la capital de España. Los interesados de otras zonas tendrán que coger el AVE, (ojalá llegue puntual) echar el día en la Villa y Corte y deleitarse en la contemplación y compra – ¿por qué no? – de cualquiera de estos bellos ejemplares.
Isabelle Fa representa la excelencia en joyería. Sus creaciones aúnan un diseño contemporáneo y moderno inspirado en formas orgánicas con la más alta expresión de artesanía y maestría. En los años 80 del siglo pasado, Hans-Georg Mössner se hizo cargo de la fábrica de artículos de oro de Emil Mössner en Eisingen, Alemania. Después, su esposa Isabelle, una apasionada orfebre, se unió al proyecto y juntos han trabajado en la preservación y cuidado de la artesanía joyera tradicional para reflejarlo en sus creaciones, que son piezas espectaculares y únicas. Este es el origen de cómo surgió la marca Isabelle Fa, que hoy continúa su andadura con la segunda generación representada en sus hijos Patrick y Alexandre.
Destacan por sus perfectos acabados. A saber: cierres casi invisibles y detalles especiales y significativos como el que cada pieza esté adornada por un diamante. Son joyas que tienen movimiento y volumen, lo que les confiere elegancia, estilo y versatilidad para adaptarse a cualquier «look». Las formas orgánicas son las protagonistas de estas joyas que tienen en los eslabones su principal inspiración. Hay formas redondeadas, ovaladas y cuadradas que brillan en cinco colores diferentes de oro: amarillo, rosa, blanco, gris y Rouge Royal, además de platino. Joyas que reflejan el amor y pasión con las que están hechas, la búsqueda de la perfección teniendo como punto de partida la orfebrería tradicional, pero aplicando los códigos estéticos contemporáneos para lograr una belleza que perdure. Intemporal; o sea, lo último en moda.