La moda es el eterno retorno de lo nuevo. Lo dijo el filósofo Walter Benjamín y servidora lo repite por activa y por pasiva cada vez que escribe un artículo sobre esta disciplina. Hoy traemos otra vez a telademoda a Bershka, esa firma perteneciente a la cadena Inditex, que empezó vendiendo para adolescentes y que ahora también se acuerda de los de mayor edad. Si es que somos más…Y vuelve porque ha puesto en primera línea de tendencias a las prendas vaqueras, al tejido denim. Un estilo que a los talludos nos trae claras reminiscencias de rebeldía, aunque en muchos casos sólo fueran de salón. El vaquero vuelve porque resulta que ha despertado el interés de la generación Z, al igual que otras piezas intemporales. Parece que estos chicos han venido al mundo con la sensatez incorporada.
Bershka Denim Core otoño-invierno 2024 es el nuevo editorial (para los bisoños en el vocabulario «fashion», editorial es lo que antes llamábamos reportaje gráfico), en colaboración con el director creativo británico Jamie Reid. En él presenta piezas y estilos claves para esta temporada, entre los que destacan la tendencia «western» (las pelis de indios y vaqueros de toda la vida) y los códigos «workwear» (ropa de tabajo) realizadas con tejido denim. Un tejido que, según la teoría más aceptada, proviene de Nimes, una ciudad del sur de Francia entre Montpellier y Aviñón, de ahí su nombre. Históricamente, esta región fue un gran centro de producción textil en torno al algodón. Lo empezaron a usar los campesinos en los siglos XVII y XVIII. Era una tela tan resistente que se empleaba para la fabricación de las velas de los barcos, pero también de toldos y lonas.
Después de esta pincelada de historia de la moda, volvemos a Bershka y al creciente interés que la generación Z demuestra por las prendas intemporales y en concreto por el denim. En el editorial de Jamie Ried se celebra la versatilidad (nunca esta palabra fue tantas veces invocada) de este tejido, incidiendo, por supuesto, en los estilos más relevantes del momento: «western» y «wokwear». Para las chicas, el denim se presenta como un lienzo, donde «Western» y American indie» se combinan con texturas de pelo y piel. El índigo, característico del tejido vaquero sin tratar, destaca como el color dominante, sin olvidarse de los lavados más acusados de algunos pantalones o la incorporación de detalles de pana en las cazadoras. Para los chicos, se parte de la macrotendencia «workwear «y «utility», con prendas funcionales para siluetas contemporáneas. Este ejercicio de estilo integra influencias que van desde el «preppy» (pijo) hasta el Y2K (mezcla del boom tecnológico de principios del año 2000 con elementos de la cultura pop), permitiendo que cada pieza se adapte a diferentes estilos sin perder el enfoque minimal.