Mis seguidores saben que me gustan los relojes. Adornar el tiempo es una manera de hacerlo más llevadero cuando avanza en tu contra. Ya sabéis el poder balsámico de la estética, entre otros. Hoy me entero que una de las firmas de más solera en el sector, Wempe @wempe, ha ampliado su oferta con el lanzamiento de Iron Walker Chronograph XL, en cuatro versiones, y dos modelos de relojes aviador Zeitmeister en edición limitada. Los miro y no sabría con cuál de ellos quedarme. Todos van a favor del tiempo.
Empecemos por ver qué nos ofrece el Iron Walker Chronograph XL. Es un reloj de aspecto deportivo en tamaño «oversize», enorme, para entendernos. Cuenta con un bisel de acero inoxidable con revestimiento y pulsera de caucho o de acero inoxidable. En color negro mate o azul nórdico, no confundir con azul mediterráneo o azul del cielo de Sevilla, ya está disponible en todas las sucursales de Wempe y en su página web: www.wempe.com.
Yo le he echado el ojo al Zeitmeister Aviador. Es un modelo con mucha personalidad y con una aureola aventurera/ romántica que ríete de Indiana Jones y sus sucedáneos. Luego a lo peor lo ves en la muñeca de un alto funcionario, de esos que han nacido a una burocracia pegados. Nadie es perfecto. La firma alemana ha lanzado dos nuevos modelos de aviador Zeitmeister, donde la correa en lona hecha a mano contribuye a reforzar la impronta aeronáutica. Sólo hay cien unidades. O sea, que si no corres, vuela.
Para los que no pasen mucho por telademoda, vamos a presentar a Wempe. Es una empresa familiar, con sede en Hamburgo que se fundó en 1878. Está dirigida por Kim-Eva Wempe, nacida en 1962 y cuenta con 34 sucursales en ciudades de todo el mundo como Madrid, Londres o Nueva York. La compañía ha estado ligada durante generaciones a prestigiosas manufacturas relojeras de Suiza y Alemania. Wempe produce su propia marca Glashütte I/SA de cronómetros de pulsera en Glashütte, así como su propia línea de joyería by Kim, en Schwäbisch Gmünd.