Volvemos a las andadas con las lolitas en la moda. Es cíclico como dicen que son las crisis, pero alguien con peso específico, o sea con autoridad moral, debería poner freno a ese adelantar la hora de los niños para convertirlos a empujones en mayores sin reparos. Y simplemente para que algunos se beneficien económicamente y a otros se les pongan en bandeja sus turbios objetos de deseo sexual. ¿Es necesario que una criatura todavía sin formación física ni psíquica emule a un adulto y se transforme en la diana perfecta para pervertidos, simplemente para que un tercero un cuarto o un quinto se lucren? Sin caer en papanatismos ni en ñoñerías hay que reconocer que cada cosa tiene su tiempo y su momento. Pero los padres de Thylane Blondeau, evidentemente, tienen otra manera de pensar. Thylane es reincidente. Hace tras años, cuando sólo tenía diez, protagonizó un reportaje fotográfico para la revista Vogue Francia, dirigido por el diseñador Tom Ford, en el que posaba pintada hasta la saciedad, tumbada todo lo sexy que una niña de su edad puede en mantas de leopardo, de dudoso buen gusto las mantas y de dudoso buen gusto el reportaje.
Ahora, esta niña, que por mucho que haya avanzado la vida, debería andar entre los algodones de la inocencia, ha vuelto a posar en actitud sensual para la publicación Jalouse desde donde se la «vende» como la «la nueva Kate Moss«. La chiquilla lo ha anunciado en su cuenta de Twitter, que es la nueva versión del comunicado de famosos, estrellas y hasta miembros de familias reales. Vladimir Nabokov ni se imaginó al escribir su famosa «Lolita» que habría tantas clones y que habría plataformas «serias» que consentirían su descarnada exposición. El reportaje anterior impactó tanto a la opinión pública de Occidente que la directora del Vogue Francia, Carine Roitfeld, tuvo que dimitir de su cargo, aunque disimulado con el ya clásico por cuestiones personales. Fue el detonante de numerosas controversias e incluso se debatió en los parlamentos de Francia y Reino Unido. La chiquilla ya tiene un buen currículo. Se inició con Jean Paul Gaultier y posó para Lacoste en varias publicaciones de moda para niños. Sus rasgos faciales han hecho que la comparen con Brigitte Bardot, aunque la actriz comenzó su carrera como modelo a los quince años posando para la revista Elle como adulta y Blondeau se adelantó un lustro. Es que vamos con unas prisas…