Ahora, en estos momentos, no hay firma sin conciencia ecológica ni colección sostenible, aunque no rime, como antes no había domingo sin sol ni mocita sin amor. Cuando pase esta mala racha con la que hemos coronado el año bisiesto, tendremos una moda enteramente preocupada por el medio ambiente. O eso al menos esperamos al aferramos a noticias de que…