Mi primera chemise Lacoste (antes se decía así) me la compró mi madre en Fillol, una tienda de Algeciras. Una de esas tiendas que era una raya en el agua en la marejadilla comercial de aquellos años setenta, que querían despuntar, pero se quedaban mochos. Era un polo blanco de pico y la falda a juego, muy tenista, porque…