Libélula Lila: Cerámica para vestir

por Clara Guzmán

 

Le acaban de conceder el Premio Della Robbia en su modalidad de “Innovación en la Artesanía” y Victoria Fuello, que es ceramista profesional desde el año 2007, está como niña con zapatos nuevos. Sus joyas artesanales se merecían este galardón que otorga la Junta de Andalucía.

Hace cuatro años, Libélula Lila se estrenó en el mercado navideño de la Plaza Nueva.  Había nacido una firma de complementos distintos: cerámica para vestir. Piezas que, a pesar de su apariencia, son livianas. «Todo lo que hago me lo tengo que poner porque soy muy exigente y lo que no quiero para mí no lo quiero para los demás. No es el mercantilismo lo que me mueve.  Mis diseños no pesan nada, ni siquiera el vestido de cerámica que realicé para la edición de Sevilla de Moda del año 2009 y que llevaba 283 piezas y más de treinta metros de hilo de metal. Los collares y los pendientes de cuentas esféricas están huecos por dentro para que no sea un martirio lucirlos. El secreto está en que trabajo la cerámica en láminas finas».

 

A Victoria Fuello le interesan todos los movimientos pictóricos, a excepción del abstracto, porque, confiesa, sigue sin entenderlo. «Yo soy muy figurativa, el modernismo siempre me ha gustado, de hecho el símbolo de mi marca es una libélula, insecto característico de los diseños de esa época, pero ahora me estoy volviendo barroca. Para mí el arte es ocio, porque me divierte y es una forma de expresión con una variedad muy amplia».

Entre sus últimas colecciones destacan la que ha bautizado con el nombre de  «Éboli», porque recuerda al siglo XVI y a la enigmática princesa, y «Antique», que tuvo París como fuente de inspiración. «Fui con mi marido y mis dos hijas a la capital de Francia y nos hospedamos al lado del Centro Pompidou. Compré muchos libros sobre joyería modernista y me empapé de la ciudad.  Las piezas son de cerámica  trabajada con plata envejecida y esmalte y la gente al verlas cree que son piedras naturales».

Alegrar la vida

Victoria Fuello dice que los complementos alegran mucho la vida. «Te pones un collar estupendo y vas arreglada aunque sólo lleves una camiseta y unos vaqueros. Tengo clientas que, como yo, se visten al revés que todo el mundo. Primero eligen el complemento y a partir de ahí la ropa que se van a poner». Los diseños de Libélula Lila se venden en el Mercado del Postigo y on line (www.libelulalila.es) y facebook. «Hace tres años vendía tres piezas en total por internet y ahora son tres a la semana. Las envío por correo certificado y tengo que decir que el Servicio de Correos funciona muy bien. Mis piezas son delicadas, claro que sí, pero si se tratan con mimo te duran una eternidad. De todas formas, todos los materiales tienen pegas. Tampoco me preocupan los artículos de importación, porque no me perjudican. No me parece bien que la gente critique este tipo de negocios, lo que tendría que hacer es valorar los productos de su tierra. Sin son más caros es porque tienen más calidad. También las instituciones deberían darnos el sitio que nos corresponde  a los que hacemos un trabajo creativo, porque últimamente se mezcla todo. El que monta pendientes como si fueran un rompecabezas no es artesano, la pieza tiene que ser hecha de arriba a abajo. El intrusismo es uno de los grandes problemas del sector, por eso hemos creado la asociación Abaca, de artesanas relacionadas con la moda. Somos sólo mujeres y nuestro objetivo es dignificar la profesión».

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10 comentarios

keynote speaker 30 noviembre 2012 - 18:17

Many of the opinions on this blog dont make sense.

maria luis astolfi 3 julio 2011 - 23:25

No puedo añadir nada mas bonito de lo que se dice Clara

solo que no soy nada imparcial ante esta marca , desde que la conocí me entusiasmo , me cautivo la manera de intrepetar estos materiales convirtiéndolos en moda

gracias viky por estas investigaciones y aportar tus conocimientos

felicidades por este merecido premio

Victoria 5 julio 2011 - 14:13

gracias por los comentarios, es como si me dierais un empujoncito con cada uno de ellos para seguir adelante con mis experimentos. No es un trabajo que me dé todos los días una alegría, no siempre es tan bonito como seguramente parece desde fuera y es muchas veces estresante, pero de cuando en cuando termino algunas piezas que merecen la pena todos los esfuerzos, y si encima luego me dedican estos piropos, para qué más.
Gracias Clara, me encantaría escribir la mitad de bien que tú!

blancagallegofernandez 3 julio 2011 - 23:23

Enhorabuena por ese premio tan merecido.Eres un artistaza.Maravillosas tus obras.

Sonia 3 julio 2011 - 21:32

Me gusta esta entrada. Las piezas son muy bellas.

Lola Rodríguez 3 julio 2011 - 16:05

Enhorabuena a la artista y a la periodista!!! sois dos ejemplos para mi por vuestra profesionalidad y constancia y por la pasión que le poneis a vuestro trabajo. besos

A.Giménez 3 julio 2011 - 14:23

Me sigue gustando mucho este blog por la variedad de cosas y por cómo está escrito. Estas joyitas son una pasada de bonitas.

Pilicabraloca 3 julio 2011 - 14:13

Esto me gusta mucho. Es artesanía de la buena y no esa de recorta y pega.

Cabecita loca 3 julio 2011 - 12:10

Felicidades por el premio y por las cosas tan bonitas que hace. Me encanta el colgante del que cuelga una libélula de plata. Precioso.

Marilinda 3 julio 2011 - 12:01

Preciosas joyitas de cerámica, preciosas. Están muy bien hechas, lo sé porque conozco el oficio.

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