¿Qué es el lujo?

por Clara Guzmán

 

Sortija de oro blanco flor de diamantes, en pavé talla brillante, de Shaw joyeros, Sevilla

Hay a quien le parecerá una frivolidad escribir sobre el lujo con la que está cayendo. Pero el lujo existe desde que el mundo es mundo y además cada cuál tiene su particular concepto de lo que para algunos filósofos es el culpable de la decadencia de los pueblos; para algunos economistas un motor del mercado y para algunos sociólogos un placer que nos diferencia del resto de los animales.

 

Botas de Stuart Weitzman, a quien llaman el zapatero de las estrellas

Felicidad y decadencia

 En su obra «El lujo eterno», Gilles Lipovetsky  escribe: “Al hacer desdichados a los hombres por una carrera sin fin en pos de los falsos placeres, al debilitar el cuerpo y la mente, el lujo es, por añadidura, responsable de la corrupción de las costumbres y del hundimiento de las ciudades. Al ser incompatible con la felicidad y entrañar la decadencia de los pueblos, fue la crítica moral la que rigió el análisis del lujo hasta el siglo XVIII, momento en que surgen las primeras apologías modernas de lo superfluo y de la riqueza». Pero, ¿qué es superfluo y qué es riqueza?

Bolso Maia de Loewe

Bagatelas

Seguro que para muchos hay pocas cosas superfluas, sobre todo si pertenecen a las generaciones más pimpantes; a esas que se han acostumbrado a no prescindir de nada o de poco. Para otros, la riqueza puede ser un día soleado en buena compañía, despojado de problemas y con la conciencia tranquila. No obstante, siempre, consciente o inconscientemente, nos aferrarnos a algo que nos distingue, que nos hace sentirnos únicos; algo que nos aleja del rebaño. «El último de los mendigos siempre posee una bagatela superflua. Reducid la naturaleza a las necesidades naturales y el hombre no será sino un animal». Lo escribió Shakespeare. En su época el concepto del lujo no estaba tan hermanado con el consumo, pero había que «consumir» para empaparse de lujo.

Excesos

Escribe Elyette Roux: “La lectura de cualquier diccionario etimológico que se precie nos revela que lujo deriva del latín lupus, procedente del vocabulario agrícola, que en un principio significó “el hecho de crecer de través” y más tarde “crecer en exceso”,  para luego convertirse en “exceso en general” y finalmente,  pasar a significar “lujo” a partir del siglo XVII».

Para Coco Chanel, el lujo es una necesidad del alma

El lujo para muchos puede consistir en tener tiempo, ese señor que tiene tantas novias pero que no se casa con ninguna. Un tipo que va a lo suyo desde siempre. Por eso cazarlo, atraparlo para disfrutarlo es un lujo. Para Coco Chanel, sin embargo, el lujo era una necesidad del alma, mientras que Agatha Ruiz de la Prada lo relaciona con la ostentación del nuevo rico, del arribista, quizás porque «toda la vida me han dicho que el lujo es una ordinariez». Lujo del que deriva lujuria, una palabra que surge en el siglo XII y que mantiene intacto su significado primigenio, con algún que otro retoque, claro. En ese amplio abanico de definiciones y de interpretaciones tenemos una muy actual, que concuerda con esas corrientes que hablan de sostenibilidad, de reciclaje, de respeto al medio ambiente. La pronunció el diseñador Juan Duyos y aquí queda para conocimiento general: «Comprar algo a buen precio, cuidado y saber quién lo ha hecho. Eso es para mí el lujo».

Sortija de oro blanco con gran zafiro central y diamantes, de Shaw joyeros, Sevilla

La esencia

Pero el lujo es también lo que no está al alcance de todo el mundo.S on muchos los que se aúpan para poder tocarlo o al menos acariciarlo. No pasa inadvertido. Lujo es lo que nace con la etiqueta de único porque está creado con mimo, dedicación y manos expertas. Lujo es esa artesanía refinada que nunca pasa, que siempre se mantiene terne porque ha bebido en las fuentes de la eterna juventud. Su lozanía se debe a una larga tradición, en la que firmas como Loewe, Hermès o Chanel perpetúan sus técnicas de trabajo con tal entrega, que siguen avanzando con los años pero sin perder su esencia. Al menos hacen lo posible para que nadie las pierda en los recovecos de la memoria.

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36 comentarios

Maricielo C. Marquez 12 noviembre 2013 - 3:46

El mayor lujo que puede darse cualquier ser humano es gozar de buena salud, tener un empleo que le de para subsistir y disfrutar de la vida cada dia… ah, el amor verdadero tambien es un lujo porque es muy dificil encontrarlo.

Maricielo C. Marquez 23 septiembre 2013 - 5:51

Considero el lujo como algo inalcanzable, costoso, destinado a privilegiados, elitista, herencia de poderosos como el dinero.`Pero hay un lujo al que todos podemos acceder: el de aprender a ser felices con lo poco que se tiene, el no depender de nadie, ser libre y vivir la vida con alegria sin envidiar los caros lujos ajenos que no dan felicidad.

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Nathanial 17 septiembre 2012 - 14:36

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Miguel Reyes 13 agosto 2011 - 21:04

Hola a todos , Este tema es muy interesante pues saca lo mas interior de las personas ya que el lujo lo tenemos todo al alcance de la mano.
el lujo es abundancia y ostentación pues en nuestras vida hay lujo mucho lujo , cariño , amigos, y todo lo que sea abundante en nuestra vida

Marta Vera 9 agosto 2011 - 18:43

Es lujo lo que no es necesario, estrictamente necesario? Entonces me temo que la mayoría estamos rodeados de «lujos»…
Aunque para mi el bolso de loewe sea necesario!!!

Blanca 9 agosto 2011 - 12:18

Estoy con charo guerrero. aqui estamos confundiendo lujo con felicidad. Mi prioridad es la felicidad pero eso no quiere decir que no me gusten las cosas bellas, que eso es lujo, pues entonces me gusta el lujo.

Anabel 9 agosto 2011 - 12:16

YO quiero el anillo de zafiro azul. Me gusta el lujo, ¿pasa algo?

Jacobo 9 agosto 2011 - 10:30

Me interesa el lujo como fenómeno sociológico. Me interesa por tanto este artículo y los comentarios que se suscitan. A ver si mañana vuelvo a entrar y me encuentro con otras opiniones.Buenos días y feliz verano a todos.

Eva Luna 8 agosto 2011 - 11:00

Que interesante este debate. Yo creo que el lujo es incluso poder decir lo que quieras e incluso escribirlo.Cuando se tiene libertad de expresión no se sabe lo que se tiene. Eso es un pedazo de lujo.Claro que si mi chico me regalara el zafiro de Shaw joyeros me haría muy feliz

charo guerrero 7 agosto 2011 - 19:25

Hola Clara que bonito post,me parece que se esta mezclando felicidad y lujo,y no tiene que ser asi,se puede ser feliz sin lujo alguno, y al reves , tener muchisimo lujo y ser infeliz. No ostante no se puede afirmar tajantemente,¿porque tener adceso a cosas que te gustan te ayudan a ser mas feliz? Pensemoslo. besos

José Alberto López 8 agosto 2011 - 0:17

exacto!

Hortensia Gil 7 agosto 2011 - 13:40

Me gusta mucho este artículo, Clara….
Despues de haber leído los comentarios,que por cierto son magnificos, nos damos cuenta que para la gran mayoría de nosotros el lujo es algo más espiritual o sentimental que material….para mi tambien es un lujo poder disfrturar de momentos especiales, que todos tenemos y que muchas veces no nos damos cuenta de ellos…..el aprender a disfrutar de esos momentos, eso es un lujo…aunque para mi tambien es un lujo poder leer, sentir, escuchar o incluso tener algo que alguien haya hecho, dicho,sentido o escrito para mi…………….

José Alberto López 7 agosto 2011 - 11:41

La palabra lujo la asocio a algo innecesario. El lujo determina las diferencias entre seres humanos, pone de manifiesto la insolidaridad, la falta de empatía con la realidad de la mayoría de las personas que habitamos este mundo loco.

Antonio 7 agosto 2011 - 11:30

El lujo es para mi poder hacer lo que quiera, no depender de nadie y menos de un jefe.Cuando se está tranquilo y relajado se puede valorar mejor lo que te rodea, desde un paisaje a un bonito anillo de Shaw joyeros. Buenos días.

Rosa Cuervas 6 agosto 2011 - 23:35

Querida Clara , que lujo poder leer los post de tu blog tranquilamente.
Para mi es un verdadero lujo disfrutar de mi familia sin prisas.Antes de nada está el lujo de las pequeñas cosas , detalles de la vida que cada dia te hacen ser feliz. Del lujo de lo material me quedo con mi atelier y mis clientas. Saludos.

Marisa 6 agosto 2011 - 20:05

Me gusta que la gente opine acerca del lujo. Para mí el lujo es haber llegado a mi edad, tener a mis hijos vivos, a mi marido conmigo, que nos respetemos, que nos apoyemos. Soy feliz con mis dos nietos y de vez en cuando me doy un homenaje, incluso un bolso de Loewe. Eso es para mí un capricho, los otros lujos no cuestan dinero y dan muchas satisfacciones.
Ah, y sin peloteo, un lujo es leer a Clara Guzmán, a la que también he leído y leo en ABC. Creo que no me he perdido nada de ella y no tengo el placer de conocerla.

Isa 6 agosto 2011 - 19:56

Sí, la vida es un lujo que no valoramos, pero a quien le amarga un dulce??

Conchita 6 agosto 2011 - 19:51

Yo hablaría de los lujos de la vida, no de ostentación lujosa, ni de joyas ni las firmas de moda o de modas. Que el hábito no hace al monje!

paco alorda 6 agosto 2011 - 17:20

El lujo es la baratija emocional del débil para ostentar lo que su incapacidad espiritual le demanda

Conchita 6 agosto 2011 - 19:40

Un poco fuerte el comentario, me parece a mi!.

José Alberto López 7 agosto 2011 - 13:35

de acuerdo con Paco

David 6 agosto 2011 - 14:36

Yo estoy con Luisa. A mi que me envuelvan los dos anillos, las botas .el bolso y a la Coco no,que es un coco

Luisa 6 agosto 2011 - 14:23

A mí también me parece uin lujo vivir pero el anillo de zafiro que me lo envuelvan que me lo llevo.

Lorenza 6 agosto 2011 - 10:35

VIVIR es mi lujo, que lo demás ya vendrá. Lo importante es estar vivo, pero qué pedazo de artículo ha escrito esta señora.

Manuela 6 agosto 2011 - 10:33

Salud, dinero y amor es para mí el lujo.

Alvaro 6 agosto 2011 - 10:32

Para mí el lujo es vivir en libertad.
Enhorabuena por este blog. Lo leo con mucho interés.

Rosita 6 agosto 2011 - 10:15

El lujo es para mi acariciar a mi hijo, darme un baño en la playa por la noche, poder salir y entrar cuando quiero, tomarme un gin tonic con mis amigos, disfrutar de la vida, de mi vida. Yo también quiero conocer otras opiniones, Saludos desde Huelva

Sonia 6 agosto 2011 - 10:13

Para mi el lujo es tener LIBERTAD. Buena entrada.

Samanta 6 agosto 2011 - 9:36

Me llamo Samanta y para mí el lujo es VIVIR. Me gustaría leer las opiniones de otras personas. Para mçi es vivir porque he estado varias veces al borde de la muerte.Tengo el cuerpo lleno de cicatrices, apenas salgo de micasa, pero me conformo.Soy feliz leyendo un libro y ahora con el ordenador. Es la primera vez que me meto en este blog. Me lo recomendço una amiga y estoy encantada. Mi lujo es este y el vuestro.

Helene 5 agosto 2011 - 12:36

Para mí, el lujo es cuando al comprador le da igual la cantidad de dinero que se gasta. El precio ya no tiene sentido ninguno, le da igual gastarse mucho o muchísimo.
Muchas gracias, Clara, por ese nuevo artículo.

Calurosa 5 agosto 2011 - 9:51

Suscribo todo lo que dice Freskita. A mí me gusta ver cosas bonitas pero esas cosas no me hacen feliz. Me hace feliz la sonrisa de mi hija, las miradas de mi chico. Abrir el grifo y que corra el agua, abrir la ventana y respirar. Esos son mis lujos, pero me ha encantado este artículo tan centrado, tan documentado y tan bien escrito. No conozco a la bloguera, pero me encanta leerla.

Freskita 5 agosto 2011 - 9:45

Estoy muy de acuerdo con Gonzalo, para mi lo mas importante en esta vida es estar feliz y hacer felices a los que te rodean y es un lujo poder alcanzar las metas que te propones día a día, poder hacer lo que de verdad te gusta profesionalmente, ….. para mí las cosas que te dan felicidad son el verdadero lujo. El dinero no compra la felicidad y si la frivolidad. YO QUIERO SER FELIZ.

Gonzalo G. 4 agosto 2011 - 18:13

El lujo es algo frívolo, que resulta prohibitivo siempre en tiempos de crisis, pero quienes lo defienden lo hacen a sabiendas de su exclusividad. El lujo es una marca de identidad para una pequeña sociedad que lo toma como algo propio de su clase. Pero se trata de una falsedad. El auténtico lujo no se consigue con dinero. Se trata del respeto de los amigos, el cariño de una persona amada o alcanzar un buen puesto de trabajo. Lo que consideramos lujos, joyas, coches, mujeres/hombres, es parte de la ficción de una sociedad basada en el culto al éxito. Creada por el capitalismo, visto como fábrica de servicios y bienes, la publicidad o el cine, (otra forma enmascarada de publicidad). Eso de que los diamantes son los mejores amigos de las chicas, es falso. Para mí, el lujo es alcanzar la felicidad.

Niebla 4 agosto 2011 - 16:49

Interesante y documentado artículo. Felicidades.

Felipe Vivas Tolentino 4 agosto 2011 - 9:09

Viva el lujo y el que lo trujo!

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